Nosotros, 'los indecentes'
El contexto: mi familia en la playa, yo, solo en la ciudad, temperaturas abrasadoras y un lugar tan acogedor como es mi propia casa.
Este post es una confesión, y puedo comentarles que nació al ver que para bañarme en MI piscina, en MI casa, y SOLO en la tarde, me puse un trajebaño... ¡¡UN TRAJEBAÑO!! ¿QUIÉN ME MANDA A USAR ROPA EN LA SOLEDAD DE MI CASA?
Viva el nudismo, y no me refiero a la “gente decente” que lo hace en familia, sino que como uno mismo... a veces feo, a veces lindo, a veces fofo, guatón o esbelto, somos “indecentes” y en esa soledad podemos dar rienda suelta a nuestras formas, sin ninguna incomodidad. Entonces ¿cual es el problema con el cuerpo?
Por cierto, después de notar mi actitud en la piscina me di el lujo de secarme al sol como Dios me mandó (conste, no busco que se formen una imagen que no quieren, solo quería terminar la historia que provocó este post) y fue un momento en el que logré percibirme mucho más en contacto con el planeta que en tantas otras ocasiones. A algunos puede que les de asco la idea, pero no creo que sea el único que piensa esto. Este, entonces, es un llamado a la gente indecente que lee este post, ¡unámonos y propaguemos el nudismo! Porque sin duda, es paradójicamente, una de las grandes cosas con las que nacemos.